jueves, 21 de mayo de 2009

La campaña del PSOE para las elecciones europeas



Esta que aparece arriba es la última campaña del PSOE para las elecciones europeas.

Considero que los partidos políticos deberían expresar sus ideas y propuestas, no atacar las ideas de otros. Es el ciudadano el que debe elegir libremente aquel partido con el que más ideas comparta. Y para cada votación hay que replantearse de nuevo a que partido votar, porque aparecen partidos nuevos, porque los partidos cambian y evolucionan y porque el propio mundo cambia cada día. Puede que en un momento dado las ideas de un partido sean las mejores, pero puede que después este partido se haya quedado sin ideas o no haya cumplido las promesas que hizo. Ese es el momento de votar a otro, de votar a otro no porque sea de derechas o de izquierdas o porque sea de centro, sino por las ideas que propone, por las medidas que dice llevará acabo. Hay que olvidarse de la vieja dicotomía derecha-izquierda. Uno no debe enmarcarse bajo estas ideas tan genéricas, sino que tiene que tener unas ideas propias para cada cuestión: el aborto, la religión, la educación, el modelo económico… vota luego al partido que mejor cumpla con tus ideas, olvidándote del color al que votas.

Votar siempre a un mismo partido no significa ser fiel a tus ideas, votar siempre a un mismo partido es no tener ideas, es simplemente decir que tienes las ideas que en ese momento te dice tu partido que tengas, unas ideas que cambian en el partido de un momento a otro. Votar siempre al mismo partido por el simple hecho de ser tu partido es ser un esclavo, es regalar tu voto, es no tener capacidad de decisión. Es posible que a lo largo del tiempo votes siempre al mismo partido, pero si esto ocurre, que sea porque a lo largo de ese tiempo las ideas del partido han coincidido con las tuyas, no porque tú has absorvido las ideas del partido como si fueses una esponja. No hay que olvidar que los partidos políticos están a nuestro servicio, son nuestros empleados, a los que hay que despedir y/o criticar cuando hacen mal su trabajo y a los que hay que elogiar cuando lo hacen bien.

Tampoco debemos olvidar que cuando un partido llega al poder deja de ser un determinado partido y comienza a ser nuestro gobierno, el gobierno de todos, y como tal tenemos todos que tratarlo y aceptarlo.

Este tipo de campañas que apelan al miedo han de ser totalmente censurables y rechazables, independientemente del partido que las haga. Son campañas que atacan completamente la libertad, porque intentan que no seas capaz de elegir libremente. Un partido que usa este tipo de campañas sólo deja claro que se ha quedado sin ideas, o que sus ideas no son buenas. Si lo fueran, simplemente las expresaría y eso le bastaría para conseguir los votos, porque ese es su trabajo, decir qué ideas tiene y esperar que la mayoría del país comparta sus ideas y le vote.

Apelar al miedo es una estrategia pueril que debería costarle el cargo a alguien, al que tomara la decisión de hacer esta campaña o al que la permitiera seguir adelante cuando le llegara la propuesta. Apelar al miedo es lo que hace un ladrón cuando te amenaza con un cuchillo y te da a elegir: puedes darle el dinero y vivir o no dárselo y morir. Puedes votarme o no. Pero si no me votas… esto es lo que te ocurrirá…

No, no debemos permitir que funcione así la política. La política debería funcionar así: Tengo estas ideas ¿Te importaría darme tu voto para llevarlas a cabo?

Cualquier otra forma de política debe ser censurable y rechazada

(Esta vez ha sido el PSOE el que ha hecho una campaña así, pero también he visto campañas de este tipo realizadas por el PP. Lo ideal es castigar al partido que las haga cuando las haga, sea cual sea este partido, y la forma de castigarlo es votando a otro partido o votando en blanco, pero votando, que sepan que tenemos interés pero que no aceptamos sus formas.)

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